El libro del sábado. ATXAGA O EL ALMA VASCA

Tomado de flenning

Hoy mismo hablaba con compañeros sobre la noticia de ayer y apareció, casi por ensalmo, la figura de Bernardo Atxaga, uno de mis escritores favoritos.
Casi toda su obra se enmarca en el mundo rural vasco, y aunque tangencialmente pueda aparecer el tema de ETA, no son novelas sobre la organización (excepto una de ellas). Su objetivo es más amplio, y desde el paisaje a las relaciones sociales o las costumbres arraigadas, leyendo sus obras podremos comprender en mucha más profundidad el mundo vasco tradicional, uno de cuyos cabos (aunque no el principal) es el terrorismo.
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Y dicho esto, paso a contaros altgo de las mismas.

Evidentemente, la más cercana al tema es Un Hombre solo, narración de un tal Carlos en el contexto del Mundial de fútbol de 1982.
En ella encontramos a los antiguos poli-milis que se están desvinculando de la organización antifranquista que está perdiendo su "legitimidad" ante la nueva democracacia.
El protagonista se encuentra habitado por múltiples voces que no son otra cosa que la realidad plural del movimiento aberchale en esos momentos.

De un mayor aliento literario es El Hijo del acordeonista, una de sus últimas grandes novelas, que hace una recorrido (en maravillosos círculos) que se inicia en la República y la Guerra Civil y pasa por el franquismo e, incluso, por la emigración exterior.
Una profunda y lírica investigación del complejo paso a la modernidad que ha sufrido el mundo vasco contado desde una amistad

"Las violencias son de distinto signo e incluso, moralmente, son de dirección contraria, pero se puede decir perfectamente que aquéllos que huían de los fascistas eran las víctimas de una época, y con el paso del tiempo se convirtieron en verdugos",

Y más lejano del tema de ETA pero el mejor retrato del alma vasca y del inmenso amor a la literatura del autor es su obra (a mi juicio) cumbre: Obabakoak. 
En este conjunto de relatos (que en el fondo se hilvanan todos en una novela) su prosa reluce como un verdadero diamante, y realmente es casi imposible escribir mejor sin que (además) apenas se note la maestría.

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Una verdadera obra de referencia de este autor, defensor de las libertades y del euskera (una aparente paradoja para muchos, verdadera culpa de ETA). La obra de un escritor sobresaliente que está por encima del conflicto (aunque tan a menudo se haya encontrado tan cercano) que durará mucho más que la memoria de la organización terrorista

                                                                     
Por el momento su última novela es Casas y tumbas, de nuevo deslumbrante. 
Se trata de un puzzle de historias de amistad pero también de muerte que atravisea el siglo XX y termina en el XXI.
Un novela abierta, sin un excesivo hilo argumental, que simplemente se lee por el puro placer de su prosa y de sus personajes (tan reales como poéticos)