lunes, 5 de septiembre de 2022

Arqueología de bolsillo. EL VHS



 













Tomado de wikipedia


Igual que una vez ya hizo Luis con la historia de la reproducción musical, hoy queremos hacer arqueología de bolsillo y pensar en algo tan reciente como totalmente olvidado, la tecnología del vídeo.

A mediados de los setenta dos empresas lanzaron casi simultáneamente dos tecnologías de vídeo doméstico, el Betamax de Sony frente al VHS de un conglomerado de empresas japonesas. (Incluso un tercer competidor, el sistema 2000 de Philips)

La guerra comercial no lo ganó el mejor sistema (sino el de menor calidad). Lo hizo el que mejor se supo unir a las grandes cinematográficas y fue más flexible y compatible a otras tecnologías (como las televisiones).

Este VHS tuvo muchos más cambios de los puramente industriales.

Por un lado creó un negocio que inundó las ciudades españolas en los 80: el video club en donde se podía alquilar películas. 















Fue el primer golpe a las salas de cine y permitían ver las películas en tu domicilio a un precio mucho menor, sin necesidad de desplazarse (comenzó así una tendencia a hacer del ocio algo cada vez más individualizado que ha profundizado las plataformas).

Permitía también ver películas más antiguas antes difícilmente encontrables (sólo en maratones de cine o filmotecas especializadas) que le acercaron a la literatura y su posibilidad de ir buscando las propias preferencias personales.

Democratizó también el acceso al porno (algo que se ha ido profundizando con la aparición de internet) sin el estigma de acudir a las salas X.










Por otra parte, la aparición de cintas vírgenes posibilitó la grabación (normalmente de programas televisivos), rompiendo con la dictadura de los horarios de emisión de la TV (algo que internet y las plataformas ha terminado por destrozar) y creando videotecas propias (igual que el casete había permitido para la música en los 70).

Aunque ya existían formas de grabación doméstica (el super8), el vídeo permitió video cámara cada vez más sencillas y baratas que sirvieron para la grabación de nuestros propios recuerdos, ya animados (de nuevo abrió un camino que ha culminado en nuestros teléfonos móviles)

Y todo eso sucedió en los 80, nuestra prehistoria tecnológica que iremos poco analizando en nuevos post

Lucas Corralejo


TODAS SUS ARQUEOLOGÍAS DE BOLSILLO

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por comentar en este blog. Tus sugerencias serán siempre bienvenidas.
No olvides que si publicas un comentario estás aceptando algunas normas.
Por favor, sé respetuoso en tus palabras. Por supuesto puedes estar en desacuerdo con lo dicho en este blog, y también criticarlo, pero guardando las normas básicas de educación.
No se admite spam y contenidos publicitarios (serán eliminados)
Por el hecho de comentar aceptas nuestra política de privacidad (ver en apartado política de privacidad y aviso legal) y dando consentimiento explícito a que figuren aquí los datos con los que firmes o te registres (recuerda que puedes hacerlo con tu perfil blogger, nombre y URL o en modo anónimo; no es necesario email)
Si no quieres dar consentimiento, no comentes. Si tienes dudas, visita la política de privacidad.

Responsable de los datos: Vicente Camarasa (contacto correo en la parte superior derecha del blog).
Finalidad: moderar los comentarios.
Legitimación: consentimiento del usuario
Destinatarios: el sistema de comentarios de Blogger.
Derechos del usuario: acceder, rectificar, limitar y suprimir datos (si los hubiera)