LA MÚSICA DE LOS 70 (3). EL PUNK

Pocos estilos musicales tienen tanta mitología y estética y tan poca sustancia musical.

Pues en realidad, el punk es una ideología que, ocasionalmente, derivó en música.

Sus orígenes hay que situarlo a finales de los 60, explotando en el Reino Unido y extendiéndose por EEUU y el resto de Europa.

En el fondo deberíamos entenderlo como una versión (negativa y escasamente articulada) de los movimientos contestatarios de finales de los 60 que frente al "buenismo" hippie.

Una subcultura originada en barrios marginales que, sin saber muy bien por qué, contesta contra un mundo capitalista que origina toda una serie de servidumbres y controles (sociales, educativos, económicos, políticos, culturales).

En ese sentido se trata de una nueva versión del anarquismo, especialmente en su carácter destructor, de limpieza.

Precisamente por ello la estética es tan sumamente importante en el movimiento al romper con las convenciones establecidas (y todo lo que significaban). Desde las crestas de colores, los imperdibles, la estética de lo feo y antiestético son gritos contra una sociedad que no les gusta. 

De la misma manera funcionan sus canciones que pasan de lo dadaísta a la pura agresividad (tan frecuente en sus conciertos, con sus famosos escupitajos).

Basta con leer la famosa letra de Dios Salve a la Reina para entenderlo todo (aquí ya analizamos)

En el terreno musical se busca un sonido escasamente elaborado (tanto como respuesta ante el rock progresivo como por la escasa pericia musical de sus componentes), basado en las formas rock, con escasos arreglos, tempos rápidos, melodías simples y fuerte amplificación de guitarras y percusiones que dejan a un lado la melodía en favor de la explosión sonora, tronante y acelerada, que se convierte en una verdadera descarga de adrenalina

En España Ramoncín y sobre todo Kaka de Luxe son nuestra aportación al punk y el gran fermento de lo que será la Movida

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