Basilio Trilles ha escrito una novela apasionante que se lee como un suspiro (un estilo puesto en favor de la eficacia aunque con algunos patinazos líricos) en donde se une literatura, guerra, pasiones amorosas... en torno a la figura de Blasco Ibáñez.
Tomado de wikipedia
Muy documentada, se nos presenta su figura como lo que fue, un verdadero torrente vital. Escritor a veces comprometido con los ideales y otras por el dinero (era un bon vivant), republicano feroz, amante compulsivo, gran orador y un tanto ególatra, iniciador de mil aventuras (desde una hacienda para el arroz en Argentina a un partido, un diario -El Pueblo-, una editorial, numerosos duelos...).
Junto al personaje, el otro gran protagonista es la Primera Guerra Mundial vista desde Francia en la que Blasco Ibáñez tomará claro partido, dedicando su faceta periodista (y también la de escritor, con su famoso Los Cuatro jinetes del Apocalipsis) a defender a la república.
Se nos muestra aquí cómo evoluciona la ciudad desde el hedonismo al sacrificio a la vez que vamos paseando por alguno de los escenarios de la guerra (Reims, Marme, los gases venenosos de la batalla de Ypres, los bombardeos alemanes sobre París) o la propia batalla interna de la propaganda y el espionaje en la que la figura de Blasco se vuelve objetivo prioritario para la inteligencia alemana.
Entretenido, histórico y apasionante. Una excelente lectura para rescatar a uno de nuestros más ilustres (y olvidados) escritores modernos y dar un buen paseo por el París más exclusivo de cafés y restaurantes al que Blasco nunca renunció
Entretenido, histórico y apasionante. Una excelente lectura para rescatar a uno de nuestros más ilustres (y olvidados) escritores modernos y dar un buen paseo por el París más exclusivo de cafés y restaurantes al que Blasco nunca renunció
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