El Poema de Gilgames estaba ahí para recordar que los mayores esfuerzos desplegados por este héroe habían resultado vanos para triunfar sobre ella. Y cuando, llegado al término de su largo y terrible viaje, se encontraba frente al superviviente del Diluvio, del que esperaba obtener el secreto de su privilegio de inmortalidad, Uta-napisti le decía:
Como las cañas del cañaveral, la humanidad debe ser quebrada.
Incluso el mejor de los jóvenes, la mejor de las jóvenes,
son arrancados por la mano de la Muerte, la Muerte, que nadie ha visto,
cuyo rostro nunca nadie percibió,
cuya voz nadie oyó: la Muerte cruel, que tritura a los hombres…
como hierbas efímeras arrastradas por el agua.
De rostros que veían el sol ¡de un solo golpe, nada queda!
El dormido y el muerto son iguales.
Jamás se pudo reproducir la imagen de la Muerte, y, sin embargo,
¡desde sus orígenes, el hombre es su prisionero!
Desde que […], reunidos los Grandes Dioses,
Mammïtu, la Hacedora de los destinos,
fijó el azar con ellos,
los dioses nos impusieron la muerte y la vida,
dejándonos en la ignorancia del momento de la muerte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por comentar en este blog. Tus sugerencias serán siempre bienvenidas.
No olvides que si publicas un comentario estás aceptando algunas normas.
Por favor, sé respetuoso en tus palabras. Por supuesto puedes estar en desacuerdo con lo dicho en este blog, y también criticarlo, pero guardando las normas básicas de educación.
No se admite spam y contenidos publicitarios (serán eliminados)
Por el hecho de comentar aceptas nuestra política de privacidad (ver en apartado política de privacidad y aviso legal) y dando consentimiento explícito a que figuren aquí los datos con los que firmes o te registres (recuerda que puedes hacerlo con tu perfil blogger, nombre y URL o en modo anónimo; no es necesario email)
Si no quieres dar consentimiento, no comentes. Si tienes dudas, visita la política de privacidad.
Responsable de los datos: Vicente Camarasa (contacto correo en la parte superior derecha del blog).
Finalidad: moderar los comentarios.
Legitimación: consentimiento del usuario
Destinatarios: el sistema de comentarios de Blogger.
Derechos del usuario: acceder, rectificar, limitar y suprimir datos (si los hubiera)